Los excesos en la mesa son una de las costumbres más frecuentes de las comidas y cenas navideñas. Por esta razón, los expertos recomiendan disfrutar de los placeres culinarios típicos de estas fiestas pero, con moderación porque, ¿realmente merece la pena tirar por la borda en unos cuantos días el esfuerzo llevado a cabo durante todo el año por seguir un estilo de vida saludable?
Todo un abanico de placeres culinarios llegan cada año para convertirse en los grandes protagonistas de las mesas de la mayoría de familias de nuestro país, durante las fechas navideñas.
Ante esta realidad, la pregunta es: ¿Cómo hacer disfrutar a nuestro paladar sin que ello suponga poner en riesgo nuestra salud? Según Jesús Román, experto en Nutrición y secretario general del Comité Científico del Instituto de Investigación Agua y Salud (IIAS), lo ideal es, seguir los patrones establecidos por la Dieta Mediterránea y compensar los días de “excesos” con una alimentación variada y equilibrada, la práctica de 30-45 minutos diarios de ejercicio físico moderado y, por supuesto, la ingesta de 2-2,5 litros de agua cada día. Además, recomienda:
Que no falte en la mesa el Agua Mineral, ya que, además de hidratarnos, nos ayudará a realizar mejor la digestión de los alimentos, para evitar así las digestiones pesadas y molestias estomacales y a evitar sumar “calorías de más” con la ingesta de bebidas de alto aporte calórico.
Uno de los colectivos que mayor vigilancia deben vigilar de una manera especial su alimentación e hidratación durante estas fiestas son las personas con diabetes.
Según explica Andoni Lorenzo, presidente de la Federación Española de Diabetes (FEDE), “las personas con diabetes necesitan vigilar su hidratación a lo largo de todo el año, pero es cierto que durante las fiestas de Navidad debemos prestar una especial atención a lo que bebemos. Y es que, es muy habitual que nos encontremos en la mesa con otras bebidas, con y sin alcohol, que pueden desplazar al agua y, si no vigilamos su impacto sobre nuestros niveles de glucosa en sangre, pueden interferir en el buen control de la diabetes”.
Respecto a la alimentación, Lorenzo aconseja apostar por “productos de origen vegetal y de temporada; los pescados y las carnes magras; y todos aquellos que sean fuentes de proteínas de calidad, como las legumbres. Además, es importante controlar los postres y otros alimentos ricos en hidratos de carbono, como los dulces navideños.
En cuanto a las bebidas, la primera y principal opción debe ser siempre el agua, y se deben evitar los excesos en el consumo de alcohol y otras bebidas que pueden hacer fluctuar la glucemia. En cualquier caso, creo que lo más oportuno es que cada persona consulte con su equipo médico de referencia, ya que son los profesionales más indicados para ajustar estas recomendaciones a las circunstancias de cada persona con diabetes”. A la hora de asegurar una hidratación adecuada en las personas con diabetes, el presidente de FEDE recomienda que:
Además de priorizar el agua como bebida principal, es necesario recordar que esto no consiste únicamente en beber un vaso durante las comidas, sino que la ingesta de líquidos se debe repartir a lo largo de todo el día. Como mínimo, debemos beber unos 2 litros de agua al día, ajustando esta medida en función de la edad, la práctica de ejercicio físico, etc”. A este respecto, destaca que, “para ello, creo que la Guía de Hidratación que se ha elaborado desde el Instituto de Investigación Agua y Salud es una interesante fuente de referencia.
La práctica de ejercicio físico moderado a diario es otro de los hábitos más recomendados para mantener la diabetes “a raya” durante estas fiestas. Así, Lorenzo asegura que, “durante la celebración de las fiestas de Navidad no debemos dejar de lado la práctica de ejercicio físico, una actividad imprescindible para el buen control de la diabetes, y especialmente en estas fechas de excesos”.
¿Qué tipo de agua elegir?
A la hora de elegir el agua con el que asegurarnos una hidratación segura estas fiestas, Jesús Román lo tiene claro. Así, asegura que, “durante las fiestas navideñas, en las que se incrementan las comidas fuera de casa, la bebida más esencial para hidratarnos es el Agua Mineral, “ya que esta garantiza una hidratación con un agua de calidad y con plenas condiciones de seguridad alimentaria, allí donde estemos”. Además, “al poder consultar en el etiquetado su composición y características, podremos elegir el agua que mejor se adapte a nuestras necesidades y preferencias”.
Así, para evitar posibles engaños o confusiones, Jesús Román asegura que, “para asegurarnos que el agua que se nos sirve en un restaurante es Agua Mineral, es recomendable exigir que la botella sea abierta en nuestra presencia. Escuchar e “click” a la hora de abrir la botella, es la primera señal de que se trata de Agua Mineral”.
Ahora que ya conoces las recomendaciones de los expertos, tan solo te “toca” ponerlas en práctica y disfrutar de unas ¡Felices Fiestas!