GOLPE
DE CALOR
La hidratación es clave
¿Qué es el Golpe de Calor?
Los seres humanos mantenemos nuestra temperatura corporal alrededor de los 36-37ºC para que el organismo funcione con normalidad. El cuerpo regula su temperatura al compensar la producción y la pérdida de calor con unos mecanismos de termorregulación.
Ante un incremento de la temperatura interna o externa, pone en marcha mecanismos de compensación para eliminar el exceso de calor. Cuando estos mecanismos fallan, cuando no son suficientes para eliminar el calor o cuando actúan durante mucho tiempo, se producen los trastornos por calor. El más conocido y grave es el golpe de calor.
El golpe de calor es un problema grave que ocasiona que el cuerpo sea incapaz de controlar la temperatura, que se va incrementando rápidamente, por eso, es muy importante estar atento a los primeros síntomas.
¿Qué hacer para prevenir
un
Golpe de Calor?
Haz comidas ligeras que te ayuden a reponer las sales perdidas por el sudor (ensaladas, frutas, verduras, …).
Bebe periódicamente agua, haciendo pausas en tu actividad diaria para hidratarte.
Utiliza gafas con filtros ultravioleta.
Reduce el esfuerzo físico intenso durante las horas más calurosas del día.
No realices actividades sin camisa bajo el sol, te protege la piel y retiene la humedad.
No realices actividades que requieran esfuerzos en solitario y, si es inevitable, informa de tu ubicación a las personas de tu entorno.
No esperes a tener sed para beber, la sed es síntoma de que ya nos estamos deshidratando.
No abras las ventanas cuando la temperatura exterior sea alta, y baja las persianas cuando el sol incida directamente.
Protégete del sol, busca la sombra.
Cuida tu piel con protectores solares adecuados.
Cúbrete la cabeza con gorra, sombrero o pañuelo.
Usa ropa ligera y de color claro, y un calzado fresco, cómodo y transpirable.
¿Qué colectivos son más vulnerables
ante el Golpe de Calor?
Hay grupos de población en los que, por sus especiales circunstancias y diversos factores, su capacidad para detectar y responder a los cambios de temperatura no es la adecuada y son más sensibles a las altas temperaturas. Por ello, deben estar más atentos ante una ola de calor y requieren que les prestemos una especial atención: