Las fiestas de pijamas empiezan a ser una moda en nuestro país, sobre todo entre adolescentes y preadolescentes. Aunque hasta ahora han sido más habituales entre niñas, los chicos últimamente también se han animado a hacerlas.
Empezar a dormir fuera de casa es algo muy divertido para los niños, una manera diferente de entretenerse, que además los hace sentirse más mayores. Los padres debemos enfocarlas como una buena opción de esparcimiento en un entorno seguro que además favorecerá sus relaciones sociales y les ayudará a intimar con su círculo más cercano de amigos.
Y ya metidos en canciones ¿por qué no ser nosotros los anfitriones de una gran fiesta de pijamas que sorprenda y alucine a nuestros hijos y sus amigos? No te preocupes, es más sencillo de lo que parece. En este post te damos las claves para que tu fiesta sea todo un éxito.
Lo primero y más importante es planificar bien el evento. Empezando por pensar ¿Cuántos niños? Depende un poco de la cantidad de amigos íntimos que tenga tu hijo, lo ideal son entre cuatro y seis, meter muchos más puedo significar una locura si la fiesta se anima demasiado.
Además debemos de pensar que es necesario tener sitio para que duerman todos. Lo mejor es despejar el salón de muebles, dejando sitio libre para que puedan moverse, saltar y bailar, e improvisando otra zona de dormir, con colchones hinchables o edredones, sobre los que los niños colocaran sus sacos de dormir.
Una vez pensando el número de invitados, podemos hacer unas bonitas invitaciones personalizas, con fotos o dibujos, en las que pondremos nuestro teléfono para que los padres de los otros niños nos puedan llamar y consultar dudas. No olvidéis especificar que cada niño debe traer su pijama, su neceser y su saco de dormir.
También podemos decorar un poco el salón, con algunas guirnaldas o adornos, poner unas bombillas de colores que den luz más íntima, o colocar almohadones y cojines, para hacer una batalla de almohadas en condiciones. Se trata de crear un ambiente confortable que favorezca la complicidad y las confidencias entre los participantes.
Otro detalle importante es grabar la música que le guste a cada uno de los invitados y hacer un remix con las canciones. Para organizar todo esto es indispensable contar con la ayuda de nuestros hijos, que además disfrutaran de lo lindo planeando la fiesta. Para entretenerlos también podemos organizar concursos y juegos.
Elegir la mejor comida y bebida
En este tipo de fiestas, la comida y la bebida no pueden faltar. Unas pizzas, unos sándwiches vegetales o unas tortillas de patata serán un alimento apropiado. También podemos introducir comida más sana, presentándola de forma divertida. Y como se trata de una fiesta, y no es algo que se haga a menudo, podemos acompañarlo de snacks. Para beber y así compensar, no debemos olvidar el agua, bebida esencial para hidratarnos.
Sobre todo durante la infancia es muy importante beber la cantidad necesaria de agua diaria. El Agua Mineral Natural debe acompañar al niño tanto en las comidas como fuera de ellas, como parte de una estrategia de hábito saludable que prevenga el sobrepeso. Una idea divertida para fomentarlos a beber agua, es ofrecerles unos botellines de Agua Mineral personalizados, con sus nombres o sus fotos. Estarán encantados de beber de ellos y podrán llevárselos cómo recuerdo de esa velada inolvidable.
Tras el picoteo o durante éste, nada mejor que ver una película tumbados en el suelo o sobre los sofás. Podemos optar por una comedia o una película de aventuras. Después un poco de karaoke, podría poner la guinda a la reunión.
Llegada la hora de acostarse, bajamos las luces y toca el momento de contarse secretos y hablar de sus cosas, mientras les llega el sueño. Sin duda, les costará dormirse y puede que sea ya muy tarde, pero una noche es una noche.
Durante la fiesta, nuestro papel es estar atentos a sus necesidades y accesibles, pero sin estar presentes continuamente, dejándoles su propio espacio y libertad para expresarse. Sólo debemos intervenir si vemos que el bullicio es excesivo o hay algún problema.
