El Agua Mineral Natural en la infancia
Opinión de los expertos
Para la Asociación Española de Pediatría (AEP), una sociedad científica con casi un siglo de andadura, la promoción de una alimentación saludable entre los más pequeños es una cuestión clave, no sólo para mejorar y mantener su salud durante la etapa infantil, sino para asegurarles, en la medida de lo posible, una mejor calidad de vida como adultos del mañana.
Dentro de una alimentación saludable son tan importantes los alimentos que la conforman, con sus raciones diarias recomendadas, como las bebidas a incluir. En este sentido, se puede decir que el Agua Mineral Natural constituye una de las bebidas recomendadas en la infancia.
Durante el primer año de vida, es aconsejable el uso de Agua Mineral Natural para la preparación de biberones, ya que gracias a su pureza original y a la ausencia de tratamientos químicos y microbiológicos no necesita nunca ser hervida. Durante la edad infantil y la adolescencia, el agua, junto con la leche, son las dos bebidas más habituales en la alimentación.
Hay interesantes trabajos que demuestran cómo el consumo de más agua en los colegios durante todo un curso escolar se acompañaba de un descenso del 31% del riesgo de sobrepeso.
De hecho, el agua es la bebida que deben consumir los niños tanto en las comidas como fuera de ellas como una estrategia de hábito de vida saludable, que ayudará a prevenir el sobrepeso. De este modo, su consumo como bebida de referencia en la mesa ha de extenderse también a la escuela. Hay interesantes trabajos que demuestran cómo el consumo de más agua en los colegios durante todo un curso escolar se acompañaba de un descenso del 31% del riesgo de sobrepeso.
No hay que olvidar, además, que el niño debe beber una cantidad diaria adecuada de agua, que oscila entre 0,6 litros en el primer año de vida y 1,8 a 2,6 litros en la adolescencia. Si esta cantidad de agua proviene del agua mineral natural, estaremos ofreciendo a los más pequeños una bebida pura, libre de tratamientos químicos y microbiológicos y con una composición mineral constante en el tiempo que consta en su etiquetado, por lo que el pediatra podrá recomendar determinadas aguas minerales en función de la concentración de sodio, calcio y flúor, fundamentalmente.
Para la Asociación Española de Pediatría (AEP), junto con el Instituto de Investigación Agua y Salud (IIAS), es un orgullo poner en sus manos esta publicación sobre el papel del Agua Mineral Natural en la infancia.
Nuestro deseo es que sirva de orientación para padres, profesores y profesionales de la salud, contribuyendo a mejorar la calidad de vida de los niños.